martes, 6 de julio de 2010

Joder! ¿Y si empezamos a pensar que a Benjamin lo mataron?

Dos papeles de chocolate al borde de una planta
dos muy distintos
y el cielo rosado asiste mi forma de mirar
mi forma de mirar que ya te toca aunque no se pueda.

Te doy un beso mamarracho y te mando unos tantos imperfectos.
Asumo que la vida son otras cosas más pero hoy quiero acomodarte el pelo,
hacer como una casita con tus manos y meterme ahi un rato.
Debe ser por eso que todo lo de afuera aturde,
y quiero que te quiero y la cómoda burbuja y los lentes empañados por el aliento.
¡Ves! por eso no los uso para poder dar besos.
El tiempo sin tiempo pasa,
aunque el tiempo no existe y ya te extraño.

Un Estancia Mendoza a la mitad en mi escritorio de la pieza,
tres augujeritos entremedio por los que se mete la luz;
la sentencia despúes de la tierra,
bocanadas de humo y olor.
Te dejo,
me dejas
y así se termina el día que empezó con nosotros en la misma posición.






Flor lopez